La entrevista laboral más larga de mi vida

Después de un merecido descanso, he vuelto a la vida cotidiana, siento como si todo hubiese quedado congelado en el tiempo desde que me fui, con la diferencia de de haber vuelvo con otro modo de ver las cosas. Entre las muchas cosas que enlisté en la prioridad Nº1 está BUSCAR TRABAJO (era imposible de obviarlo ya que todos me preguntaban que haría cuando regrese), pero no cualquier trabajo, sino uno que sea de mi carrera, que me guste y cuya remuneración cubra mis gastos (para empezar), algo difícil, verdad? Felizmente no tuve que esperar mucho, y antes de terminar el año me llamaron para una entrevista, luego fue otra y otra, no recuerdo cuantas veces fui, lo que sí se es que me estaba aburriendo (el proceso fue de casi dos semanas), aunque el puesto de trabajo era para una línea aérea, nunca pensé que el proceso iba a ser tannnnnnn largo.

El proceso de selección estaba a cargo de una consultoría, el primer día fue una preentrevista, donde iban descartando gente, en lo particular después de mucho tiempo volví a vestirme con ropa formal y a usar los incómodos y dolorosos zapatos de taco (algo que ya comienza a ser cotidiano para mi). Al siguiente día fue un examen aptitudinal que duró como tres horas, donde te hacen completar gráficos, seguir series, sinónimos, dibujar a una persona bajo la lluvia…las típicas pruebas que hacen los psicólogos, como que ya deberían cambiar el método, todos ya saben que al dibujo de la persona bajo la lluvia se le tiene que dibujar piso y paraguas, ya saben; si no pregunten a un amigo o familiar que estudie o sea psicólogo. Luego hubo otra prueba, pero esta vez era grupal para ver nuestra participación y desenvolvimiento en un grupo, en el que me tocó, hubo personas de todas las edades, carreras, background, etc. Tuve que esperar a que me llamen para la siguiente entrevista que fue una larga charla con la psicóloga donde me preguntó toda mi vida, después tuve que ir a un instituto de inglés para que me tomen un examen. Luego esperar otra vez para la entrevista con la línea aérea, de ahí me mandaron a un laboratorio para hacerme exámenes médicos de sangre y orina, para ello me sacaron sangre de ambos brazos, y una enfermera me acompaño al baño para asegurarse de que no cambie las pruebas de orina, una completa violación a la privacidad!!!! Obviamente estaba volteada pero su sola presencia era desagradable, una chica no podía mixionar hasta que cambió de enfermera. Las muestras eran para determinar consumo de drogas (marihuana, cocaína, éxtasis, heroína…), alcoholemia, sida, tatuajes, en caso de las mujeres si estábamos embarazadas. Finalmente al día siguiente tuve la entrevista final con los jefes de área de lo más relajado.

Después de todo este periplo, quedamos doce personas para empezar la capacitación, coincidentemente ya habíamos socializado en las entrevistas y a lo largo del proceso sentimos que esto era como un examen de admisión a la universidad, no se cuantos se habían presentado, pero en cada parte iban descartando más gente. Por ello evalúan muchos criterios actitudinales, aptitudinales, background y físicas, en este último punto, es innegable que en muchos avisos exigen “buena presencia” lo escuchamos siempre pero el concepto no es muy claro (es ser bonita, simpático, alto/a, flaco/a, etc???) y hasta resulta ofensivo y discriminatorio para algunas personas, que ven mancilladas sus oportunidades por este aspecto, por otro lado está la empresa que busca en sus subordinados proyectar la imagen de ésta (sobre todo en el rubro servicios). Recién lo entendí cuando me dijeron que imagine que vaya al banco y la persona que me atienda luzca aretes en la nariz (tampoco es…)

Ahora estoy a mitad de una intensa capacitación de dos meses no remunerables y, a pesar de que no veré un centavo hasta que empiece el trabajo, se aprende bastante además de departir con gente nueva y contemporánea a uno. Además creo que invierto bien mi tiempo en vez de estar en casa sin hacer algo productivo llegando a un punto de aburrirme (sobre todo si vives en medio de la nada, como yo), y regresar a la etapa "dependiendo de los padres”.

Por último solo puedo decir que la competencia es muy dura y que hay que lucharla hasta el final.